LA VEJEZ ESPERA PACIENTE......

Hoy oía en las noticias que se va a abrir una seria investigación para esclarecer el hecho de por qué son muchos los ancianos que solicitan entrar en una institución benéfica alegando que no poseen ningún bien material y necesitan asistencia. ¿ Legaron lo que poseían a familiares, vecinos, cuidadores..? ¿ Voluntariamente? ¿Manipularon su voluntad tan mermada en muchos casos entre las personas de edad avanzada ?
¡¡ Qué fuerte !! ¿ Cómo puede alguien actuar así ?
Siempre he sentido un cariño y un respeto inmenso hacia estas personas que, por el hecho de cumplir muchos años, se ven tan disminuidos. Poseían fuerza, ahora son débiles. Tenían coraje, ahora lo han perdido. Tenían experiencia y saber, ahora la memoria los ha abandonado. Hubo un tiempo que tenían independencia, ahora necesitan ayuda para casi todo. Sólo la BONDAD y GRATITUD permanecen íntegras o crecidas quizá.
Son buenos e inocentes como niños. Cuando les ofreces ayuda, compañía, cariño... te lo agradecen con lágrimas en los ojos......

Los conozco bastante. Cuando terminé mi época laboral ( cuarenta años en la escuela con niños)
decidí , como mucha gente hace, colaborar en algún voluntariado. Me fui al otro lado de la vida, los ancianos. Hace ya once años que soy visitante asidua en una residencia benéfica para "Ancianos Desamparados". ¡Cuánto se recibe a cambio de lo poquito que ofreces! Cuántos "saberes" guardo de los días que paso con ellos. Te quieren y eres su incondicional confidente. Me enternece su mirada sincera, confiada, afectuosa, aunque a veces parezcan sus miradas ausentes, miradas que se pierden en el tiempo y en el espacio.




Mira,"chiqueta" (me llaman muchas veces así porque mi nombre no les es fácil de recordar), me decía un día una anciana de más de 90 años, mira mis manos vacías. No tengo ya nada. No son mías ni la cama en que duermo, ni la mesa en la que como, ni la silla en que me siento......¿Por
qué nos afanamos tánto los hombres y mujeres, durante toda la vida, por poseer más y mas cosas? Al final todo sobra. Se necesita tan poco..... Sólo de esto no se puede prescindir: de un poco de compañía, otro poco de comprensión y de muuuuu....cho cariño. Todo lo demás sobra.
Magnífica lección la que me dio Agustina, así se llamaba la ancianita. Así vierten estos ancianos sus "gotitas de sapiencia" a quienes les escuchan y demuestran que les quieren......