El Monasterio benedictino de Santo Domingo de Silos, debió levantarse en la segunda mitad del siglo XI y primera del s. XII.
En concreto la parte románica conservada, representa una de las obras más grandiosas del arte medieval europeo.
Son extraordinarios los relieves que ornamentan las caras interiores de las cuatro pilastras que forman los ángulos de la galería.
En el centro del jardín, se eleva hacia el cielo, desafiando las alturas, este magnífico ciprés, que bien mereciera el poema que le dedicó el poeta Gerardo Diego:
EL CIPRÉS DE SILOS.
Enhiesto surtidor de sombra y sueño
que acongojas el cielo con tu lanza.
Chorro que a las estrellas casi alcanza
devanado a sí mismo en loco empeño
Mástil de soledad, prodigio isleño,
flecha de fe, saeta de esperanza.
Hoy llegó a tí, riberas del Aralnza,
peregrina al azar, mi alma sin dueño.
Cuando te vi señero, dulce, firme,
qué ansiedades sentí de diluirme
y ascender como tú, vuelto en cristales.
Como tú, negra torre de arduos filos,
ejemplo de delirios verticales,
mudo ciprés en el fervor de Silos.
( Gerardo Diego )
Enhiesto surtidor de sombra y sueño
que acongojas el cielo con tu lanza.
Chorro que a las estrellas casi alcanza
devanado a sí mismo en loco empeño
Mástil de soledad, prodigio isleño,
flecha de fe, saeta de esperanza.
Hoy llegó a tí, riberas del Aralnza,
peregrina al azar, mi alma sin dueño.
Cuando te vi señero, dulce, firme,
qué ansiedades sentí de diluirme
y ascender como tú, vuelto en cristales.
Como tú, negra torre de arduos filos,
ejemplo de delirios verticales,
mudo ciprés en el fervor de Silos.
( Gerardo Diego )
Después de esta visita y tras escuchar a los monjes sus cánticos en gregoriano, en una iglesia completamente llena y en riguroso silencio, se terminó nuestra " ESCAPADITA POR LA PROVINCIA DE BURGO "
No hay comentarios:
Publicar un comentario