¡¡¡ DIME !!!! O EL GRITO DE UNA MADRE......

En las excursiones que hacemos las compañeras de Magisterio suele acompañarnos una señora que es íntima amiga de una de las compañeras. Cuando la trajo por primera vez nos decía esta compañera que Teresa, que así se llama la señora, estaba necesitada de poner una nota alegre en su vida. Siempre me llamó la atención su mirada profunda y un tanto triste, muy triste. Habla poco, poquísimo. Sólo se ríe, ríe muchísimo con nuestras "gansadas" y toques de humor. Se lo pasa muy bien con nosotras, por eso repite una y otra vez.
En la última excursión estuvimos sentadas juntas largo rato y por fin escuché su voz. Me contó su triste historia a la vez que, cuidadosamente como si temiera romperla, sacaba de su bolso una fotografía de una hija bellísima de 16 años. Temí lo peor. Efectivamente, hace cuatro años que se fue...... ( Una víctima más de la maldita droga ). Desde entonces, me decía, se me cortó la voz. Hablo poco. Pienso mucho. Lloro más. Cuando mi corazón está lleno de sentimientos , escribo, escribo, escribo.... No tengo estudios superiores, escribo sólo lo que me dicta el corazón. Me enseñó varios folios y me los regaló. ¡ La abracé con todas mis fuerzas ! Le pedí permiso para copiar algo suyo en mi blog y me lo dio. ¿ Me autorizas a poner tu nombre? Si, me respondió. Desde entonces no he dejado de pensar en ella . Aquí vienen, pues, los sentimientos de una madre que llora con el corazón porque ya se le secaron las lágrimas.

DIME

Dime.....
¿Qué te arrebató el tiempo
con su impasible tic-tac?
La juventud, la ignorancia,
la candidez integral.
¿Qué rige nuestro destino,
cuando es tan poca la edad?

Dime.....
¿Qué te ragaló el tiempo
con su impasible tic-tac?
La templanza, la experiencia,
la ternura para amar,
la plata de mis cabellos
la mansa serenidad,
para contemplar la prisa
con la que el tiempo se va .

Dime.....
¿Qué perdura en tu recuerdo
imposible de borrar?
La muerte de aquella rosa
deshojada en el rosal,
y la fuerza de unos ojos
que me invitan a luchar,
la ternura de unas manos
que me esperan al llegar.
Esperanzas, sueños y quimeras
imposibles de olvidar.....

( Teresa Salvador )

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