Aprendí esta poesía de niña y todavía la recuerdo con frecuencia. Cada vez que paso junto a una higuera, sin proponérmelo siquiera, la recito.
Cuántas "higuera" proliferan por la vida que, por ser sensibles y saberse poco importantes, se sentirán tristes. Cuánto agradecerían una frase cariñosa, una palabra de aliento, una mirada de complicidad, un (¿por qué no?) decirles que son valiosas, que "sus frutos" son una delicia, que son útiles, imprescindibles....... ¡HERMOSAS!
Porque es áspera y fea,
porque todas sus ramas son grises
yo le tengo piedad a la higuera.
En mi quinta hay cien árboles bellos:
ciruelos redondos, limoneros rectos
y naranjos de brotes lustrosos.
En la primavera
todos ellos se cubren de flores
en torno a la higuera.
Y la pobre perece tan triste
con sus gajos torcidos, que nunca
de apretados capullos se viste.......
Por eso, cada vez que yo paso a su lado
digo, procurando hacer dulce y alegre mi acento:
"Es la higuera el más bello
de los árboles todos del huerto".
Y si ella escucha,
si comprende el idioma en que hablo,
¡qué dulzura tan honda hará nido
en su alma sensible de árbol!
Y tal vez, a la noche,
cuando el viento abanique su copa,
embriagada de gozo le cuente:
¡Hoy a mí me dijeron hermosa!
(Juana de Ibarbourou)
porque todas sus ramas son grises
yo le tengo piedad a la higuera.
En mi quinta hay cien árboles bellos:
ciruelos redondos, limoneros rectos
y naranjos de brotes lustrosos.
En la primavera
todos ellos se cubren de flores
en torno a la higuera.
Y la pobre perece tan triste
con sus gajos torcidos, que nunca
de apretados capullos se viste.......
Por eso, cada vez que yo paso a su lado
digo, procurando hacer dulce y alegre mi acento:
"Es la higuera el más bello
de los árboles todos del huerto".
Y si ella escucha,
si comprende el idioma en que hablo,
¡qué dulzura tan honda hará nido
en su alma sensible de árbol!
Y tal vez, a la noche,
cuando el viento abanique su copa,
embriagada de gozo le cuente:
¡Hoy a mí me dijeron hermosa!
(Juana de Ibarbourou)
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5 comentarios:
Me hiciste aprender la de "Andrés Puig y Cadalfuí, estudiante de derecho, salto de su diro lecho, etc. etc" y la de "Por querer atrapar melocotones..." y en cambio ésta tan bonita no. ¿Será posible? Bueno, aún estás a tiempo de enseñársela a tu nieta.
Edelia no podía ser de otro modo... Hoy descubro a la mamá de mi amiga Sirena, con tanta magia como su hija y su nieta... O quizás más, porque la Vida nos va nutriendo de vivencias que enriquecen... Qué lindo leerte y encontrar en tu blog la poesía que también recité cuando niña...
Nada es casual. Encuentro a tu hija con tantas cosas parecidas. Hasta una mamá poeta!!!! La mía, mi Mamá, ya no está aquí pero dejo un legado de poemas... Agradezco en vos a las Mamás que nos enseñaron a saborear la poesía!
Un beso bahiense.-
Gracias, una vez más, por dedicar a mi blog unos, de tus escasos, minutos.
Ojalá llegue a tiempo para enseñar a mi muñequita lo poco o mucho que recuerde.... Claro que lo de recordar ya no se me hace tan preciso.¿Dudo? ¿No me acuerdo? Con unas cuantas pistas, un poco de ingenio y un mucho de paciencia..
¡Todo lo encuentro en internet! Qué ilusión enseñar a una niña tan despierta como mi nietecita esas gotas de experiencia, que reposadas con los años, se han hecho más útiles, sabias y sabrosas. Besitos.
Hola a mi padre la diagnosticaron en noviembre una demencia, el poema de andres puig y cadalfui nos lo repetia muchas veces, hace tres dias lo intento y se pierde, lo peor de todo es que ni mis hermanos ni yo conseguimos recordarla entera. Me harias el favor de mandarmela. Te doy las gracias de antemano
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