
"Da tu primer paso ahora, no es necesario que veas el camino completo, sólo da tu primer paso y el resto irá apareciendo a medida que camines..."
Martín Luther King
EXPERIENCIAS PARA COMPARTIR CON PERSONAS "JUBILOSAS" QUE AMAN LA VIDA Y LA BELLEZA.
Toda naturaleza es un anhelo de servicio.
Sirve la nube, sirve el viento, sirve el surco.
Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú;
Donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú;
Donde haya un esfuerzo que todos esquivan, acéptalo tú.
Sé el que aparta la piedra del camino, el odio entre los
corazones y las dificultades del problema.
Hay una alegría del ser sano y la de ser justo, pero hay,
sobre todo, la hermosa, la inmensa alegría de servir.
Qué triste sería el mundo si todo estuviera hecho,
si no hubiera un rosal que plantar, una empresa que emprender.
Que no te llamen solamente los trabajos fáciles
¡Es tan bello hacer lo que otros esquivan!
Pero no caigas en el error de que sólo se hace mérito
con los grandes trabajos; hay pequeños servicios
que son buenos servicios: ordenar una mesa, ordenar
unos libros, peinar una niña....
Aquel que critica, éste es el que destruye, tú sé el que sirve.
El servir no es faena de seres inferiores.
Dios que da el fruto y la luz, sirve. Pudiera
llamarse así: "El que Sirve".
Y tiene sus ojos fijos en nuestras manos y nos
pregunta cada día: ¿Serviste hoy? ¿A quien?
¿Al árbol, a tu amigo, a tu madre?
Gabriela Mistral
La alegría sobreviene después de las ausencias, al final de las nostalgias. Si uno se encuentra con lo amado, es lógico que el gozo nos abrace y a uno le vienen ganas de cantar. Aunque no tenga voz, aunque esté ronco de pasadas angustias.
Después de todo la alegría es un préstamo que nos pertenece. Es una locurita, un premio pasajero, pero la disfrutamos como si fuera propia, como un lucro, como una primavera de la vida.
Semana tras semana, año tras año, la alegría va llenando vacíos. Hasta que no puede más y se vuelve tristeza.
Tomado del libro: "Vivir adrede"
Autor: Mario Benedetti.
Dos hombres, ambos muy enfermos, ocupaban la misma habitación de un hospital. A uno se le permitía sentarse en su cama cada tarde, durante una hora, para ayudarle a drenar el líquido de sus pulmones. Su cama daba a la única ventana de la habitación.
El otro hombre tenía que estar todo el tiempo boca arriba, sin moverse. Los dos charlaban durante horas. Hablaban de sus mujeres y sus familias, sus hogares, sus trabajos, su estancia en el servicio militar, donde habían estado de vacaciones…….. Y cada tarde, cuando el hombre de la cama junto a la ventana podía sentarse, pasaba el tiempo describiendo a su vecino todas las cosas que podía ver desde la ventana. El hombre de la otra cama empezó a desear que llegaran esas horas, en que su mundo se ensanchaba y cobraba vida con todas las actividades y colores del mundo exterior…..
Su vecino le contaba que la ventana daba a un parque con un precioso lago. Patos y cisnes jugaban en el agua, mientras los niños lo hacían con sus cometas. Los jóvenes enamorados paseaban de la mano, entre flores de todos los colores del arco iris…. Grandes árboles adornaban el paisaje, y se podía ver, en la distancia, una bella vista de la cercana ciudad…
A medida que el hombre de la ventana describía todo esto con detalle exquisito, el del otro lado de la habitación cerraba los ojos e imaginaba la idílica escena…..
Una tarde calurosa, el hombre de la ventana describió un desfile que estaba pasando… Aunque el otro hombre no podía oír a la banda, podía verlo, con los ojos de su mente, exactamente como lo describía el hombre de la ventana con sus mágicas palabras….
Así pasaron días y semanas…..
Una mañana, la enfermera de día entró con el agua para bañarles, encontrándose el cuerpo sin vida del hombre de la ventana, que había muerto plácidamente mientras dormía….
Se llenó de pesar y llamó a los ayudantes del hospital, para llevarse el cuerpo sin vida… Tan pronto como lo consideró oportuno, el otro hombre pidió ser trasladado a la cama situada junto a la ventana. La enfermera le cambió encantada y, tras asegurarse de que estaba cómodo, salió de la habitación.
Lentamente, con dificultad, el hombre se irguió sobre el codo, para lanzar su primera mirada al mundo exterior; por fin tendría la alegría de ver él mismo todo lo que su compañero le había relatado con tanto cariño… Se esforzó para girarse despacio y mirar desde la cama... Por fin lo consiguió y… se encontró con una pared blanca…
la certeza de que estaba
siempre comenzando,
la certeza de que
había que seguir
y la certeza de que sería
interrumpido antes de terminar.
Hacer de la interrupción un camino nuevo,
hacer de la caída, un paso de danza,
del miedo, una escalera,
del sueño, un puente,
de la búsqueda...un encuentro.
Fernando Pessoa
"Son pocas mis posesiones y no las puedo dividir entre tres, así que he decidido proponeros una prueba y el que yo considere que posee mayor ingenio será mi heredero"
Encima de la mesa he dejado tres monedas, una para cada uno de vosotros.Tomadlas. El que compre con la moneda algo con lo que pueda llenar la casa, se quedará con toda mi herencia.
Se fueron.
El primer hijo compró paja, pero sólo consiguió llenar la casa hasta la mitad.
El segundo hijo compró sacos de plumas,los esparció por la casa, pero no consiguió llenarla mucho más que el anterior.
El tercer hijo compró un pequeño objeto. Era una vela. Esperó hasta la noche, la encendió y llenó la casa de luz.
Este hijo se hizo merecedor de la hacienda. Su ingenio era mayor que el de sus hermanos. Así lo consideró el padre.